JUCHITÁN.— Un autobús donde viajan estudiantes de la Escuela Normal Rural “Isidro Burgos”, de Ayotzinapa, Guerrero, fue baleado la madrugada de ayer, entre las poblaciones de Palomares y Donají, sobre la carretera Transístmica, y por el ataque, el conductor resultó herido de bala.

De acuerdo con el testimonio de los seis estudiantes normalistas que viajaban en el autobús y que pidieron la reserva de sus identidades, habían salido a las 11 de la mañana del domingo de Ayotzinapa, con el propósito de llegar al municipio de San Francisco del Mar.

Luego de que sufrieron el ataque armado, como a las dos de la mañana de ayer, los propios normalistas auxiliaron al chofer que recibió en la pierna derecha uno de los cinco disparos que impactaron en la parte frontal y lateral del autobús.

El segundo conductor tomó el control de la unidad y de inmediato, sin detenerse, se dirigió hacia el hospital del IMSS de Matías Romero, guiado por los normalistas que conocen la zona, dado que son originarios de la comunidad ikoots de San Francisco del Mar.

Problemática

“Antes de llegar a Matías Romero vimos un puesto de la Guardia Nacional (GN), a quienes, tras identificarnos, les pedimos seguridad y apoyo para llegar al hospital. Se negaron y solo dijeron: ‘la escuela de ustedes es muy problemática’”, dijo uno de los estudiantes.

Los normalistas y los dos conductores del autobús acudieron a la sede de la Fiscalía General del Estado de Oaxaca de Matías Romero a rendir su declaración en torno a los hechos que vivieron en la madrugada.