La temporada de tenis profesional comenzó con el pie derecho para el zurdo Rodrigo Pacheco Méndez. Justo cuando más se necesitaba.
El juvenil yucateco, además, lo hizo en uno de los grandes escenarios del deporte blanco, dando a México a una victoria valiosa sobre Dinamarca para empatar 1-1 la serie Copa Davis, ayer en el estadio de la Hacienda San Javier, en Zapopan, Jalisco.
El triunfo de Pacheco Méndez fue, además, sobre el jugador 292 del mundo (el mejor rankeado de la serie), August Holmgren, con parciales de 7-6, 6-7 y 6-3, y fue un bálsamo para México, pues a primera hora Ernesto Escobedo había perdido el punto inicial contra el juvenil Elmer Moller, que se definió por 5-7, 6-2 y 6-2.
Para Rodrigo, que se ve como la sensación del tenis mexicano en la actualidad, es su segunda victoria en Copa Davis, pero la primera en partido completo. Su debut fue en septiembre de 2023 en Mérida ante China, en un juego en que su contrincante se retiró. “Uno… Uno…”, le gritaron cuando se puso con el match point. Y el “México, México”, se dejó escuchar, igual el “Rodrigo, Rodrigo”, arengando al tenista yucateco, quien corrió a abrazarse con su entrenador Alain Lemaitre.
Rodrigo, quien terminó como número 2 del mundo en el tenis juvenil en 2023, tuvo una intensa temporada de preparación de más de un mes en Buenos Aires para tomar forma camino a su primer año de tiempo completo como profesional.
El partido fue sumamente parejo, como lo muestran los sets ganados por ambos, en muerte súbita.
Pacheco ganó el 61 por ciento de sus puntos con el segundo servicio en el primer set para imponerse a Holmgren en el primer “tie brake” del partido. En el segundo parcial, Holmgren aprovechó el poder en su primer servicio para dominar a su rival.
Y el duelo se iba parejo en el tercer parcial, llegando empatado a 3-3, pero Rodrigo se adelantó 4-3 y quebró el servicio al danés para colocarse en inmejorable posición para, con su saque, ganar el punto final, el set y el partido.
Hoy se jugará el punto de dobles y luego Rodrigo irá ante Moller, 361 de ATP. Otro punto clave en la raqueta de la esperanza mexicana del tenis.— Gaspar Silveira